Hoy he ido a comprarme un chandal. Necesito renovar mi armario, ya que no me viene casi nada de lo que me estaba poniendo hace escasamente 2 meses…
Hace unas semanas me habría ido de la tienda con una XXL, o en el mejor de los casos, una XL apretadita.
Sin embargo, hoy me he llevado una M que me viene como anillo al dedo…
Esta no es más que una de las consecuencias de cambiar mis hábitos de vida y entrenar a diario.
“no imaginaba que el afrontar este reto iba a cambiar tanto mi vida y hacerme doblemente feliz”
Un buen día de diciembre, tras mucha insistencia de mi nuevo coach Óscar Requena (todo hay que decirlo), se me ocurrió inscribirme en una prueba de ciclismo de carretera de 190km, casi 3000m. de desnivel acumulado y cuatro puertos de montaña, alguno de ellos con pendientes de hasta el 22%…
“¿dónde vas con tus casi 100kg, que ni vas a terminar la prueba?”, “vas a ser el hazmerrerir de la carrera”
A decir verdad, si no hubiese sido por la insistencia de Óscar, jamás se me hubiese ni pasado por la cabeza hacer dicha prueba…yo era feliz cogiendo mi bicicleta a ratillos. Pero no imaginaba que el afrontar este reto iba a cambiar tanto mi vida (y hacerme doblemente feliz, por otra parte).
En primer lugar, el motivo que me movió a coger la bicicleta a diario era el miedo al ridiculo. Me decía a mi mismo:, “¿dónde vas con tus casi 100kg, que ni vas a terminar la prueba?”, “vas a ser el hazmerrerir de la carrera” “en el primer puerto te estás bajando de la bici…”
“Hacer deporte diario me hace sentirme bien, me sirve para despejar un poco la cabeza de los “quehaceres” del día a día, ser más positivo, reducir el estrés y, en definitiva, sentirme mejor conmigo mismo y con la gente que me rodea.”
Así, Óscar se puso manos a la obra, me diseñó un plan de entrenamiento, me propuse cumplirlo rigurosamente, cuidar un poco la alimentación…y el resultado son 15kg menos y la sensación de ir cogiendo forma física poco a poco.
Pero no solo he notado cambio físicamente. Mentalmente el hacer deporte diario me hace sentirme bien, me sirve para despejar un poco la cabeza de los “quehaceres” del día a día, ser más positivo, reducir el estrés y, en definitiva, sentirme mejor conmigo mismo y con la gente que me rodea.
Jamás pensé que sería de los que dicen que el día que no hacen deporte les falta algo…pero es que cuando te enganchas a esta “droga” necesitas levantarte del sofá y moverte, tu cuerpo te lo pide.
“hacer deporte de forma regular se ha convertido en un estilo de vida que, viendo los numerosos beneficios que me aporta, no quiero abandonar…”
Es cierto que hacer deporte a diario requiere algo de tiempo y de sacrificio (aprovecho para agradecer a Laura, mi mujer, su comprensión y apoyo para afrontar este reto), pero lo principal es la actitud y tener ganas de moverse.
Antes encontraba fácilmente excusas para quedarme en casa sentado en el sofá. Un día tenía que cuidar de los niños, otro me dolía aquí o allá, al día siguiente echaban mi programa favorito en la tele…con un mínimo de tiempo y sobre todo ganas, esas excusas se quedaron en el pasado y ahora estoy deseando que llegue ese momento en el que me coloco mis zapatillas o cojo mi bici para salir a sudar un rato.
El miedo al ridículo ya no es lo que me mueve a hacer deporte. Puede que me quede último igualmente en la carrera, o que siga sin poder terminarla, pero ahora eso es lo de menos…el hacer deporte de forma regular se ha convertido en un estilo de vida que, viendo los numerosos beneficios que me aporta, no quiero abandonar…
Gracias Óscar y Superentrenos.com por hacer esto posible.