Viaje A Amapala, Isla Del Tigre. Por Verónica Kattan.

Somos fuertes, podemos hacer lo que nos propongamos. Somos guerreras, sabemos sufrir y superar obstáculos. Somos lo que queramos ser, mágicas, únicas, diferentes (Sheila Avilés Castaño).

Me gustaron estas palabras de «STRONG WOMEN», para comenzar mi relato del viaje a la isla de Amapala, este fin de semana.

SOMOS GUERRERAS: Salimos de Tegucigalpa hacia el puerto de Amapala a las 10:00 am. Llegamos justo a tiempo para la salida programada a la 1:00 pm. Parte del grupo se atrasó debido a fallas técnicas de su automóvil y toco esperar bajo el sol, parada una hora y media. El viaje en lancha duro una hora y media.

«Somos fuertes, podemos hacer lo que nos propongamos. Somos guerreras, sabemos sufrir y superar obstáculos. Somos lo que queramos ser, mágicas, únicas, diferentes»(Sheila Avilés Castaño).

SABEMOS SUFRIR: Llegamos al hotel y pésima organización de parte del encargado. Estábamos sedientos, acalorados y agotados del largo y duro viaje. Por fin nos dan la habitación y con la misma alistarnos para subir la bella montaña.

SUPERAR OBSTÁCULOS: A las 4:15 pm logramos nuestra trayectoria hacia la montaña todos felices y con una menta positiva. Finalmente después de dos horas de pura subida llegamos a la cima justo a tiempo para ver el espectacular atardecer. Primer objetivo del viaje: SUPERADO CON LA MEJOR SONRISA

SOMOS MÁGICOS, ÚNICOS Y DIFERENTES: Después de una muy larga noche sin poder dormir y mucha hambre, por fin llegan las 4:00 am! A las 5:00 am suena el silbato y empieza la carrera hacia la vuelta de la isla. No hay palabras ni fotografía que realmente describa el bello amanecer. En ese momento realizas que todo por lo que pasas, en ese segundo, es que vale la pena.

No hay palabras ni fotografía que realmente describa el bello amanecer.

Solo para terminar, un final feliz. Me perdí los últimos metros (para no perder la costumbre) y termine en la playa, disfrutando del mar. «No corro para agregar días a mi vida, corro para agregar vida a mis días».

Gracias a Dilcia Aguilar y grupo GDM por la invitación y poder agregar esta maravillosa experiencia a mi vida.